Picu Urriellu. Schulze, 450 m. V/V+
Vía de escalada histórica realizada en solitario por el geólogo alemán Gustav Schulze el uno de octubre de 1906, convirtiéndose en la segunda ascensión absoluta, y primera en solitario, al Pico Urriello o Naranjo de Bulnes. En la misma, Schulze busca la chimenea norte por donde trazaron la primera escalada el Cainejo y Pedro Pidal a través de la gran terraza que recorre el vértice noreste del Picu. Brillante idea que permite entrar en la chimenea bastante más arriba y llegar hasta ella en un vadeo horizontal sin apreturas, ya que la terraza tiene la amplitud que intuyó el teutón al estudiar el recorrido. Por contra, exige comenzar la escalada en plena cara este. Elevarse varias decenas de metros de escalada vertical hasta superar la “Y” y desde la misma, enlazar con la terraza en una larga travesía hacia la cara norte.
La vía comienza al pie de la cara este, unos metros a la izquierda de la gran lastra adosada a esta vertiente con forma de “Y”.
Comenzamos esta primera parte de la escalada ascendiendo por una fisura-canalizo hasta agotarla (III+). Un pequeño paso a la derecha nos deposita en la primera reunión sobre dos clavos.
Por delante de nosotros y en la misma vía, coincidimos con una cordada de escaladores astures.
Abajo, progresando por la fisura de entrada que cada vez está más lavada.
El segundo largo lo iniciamos hacia la derecha por una vira. A continuación, escalamos en vertical enlazando canalizos con tendencia a la izquierda (clavo y puente de roca).
En los primero metros del segundo largo.
Al final del largo está lo más apretado. Superamos el último muro para montar reunión a la derecha, por detrás de la laja “Y” que en este punto se “despega” ligeramente de la pared. (IV+).
Abajo, llegando a la R2.
El tercer largo de 40 metros, comienza superando la chimenea (IV), en la que encontraremos un clavo a la derecha a los pocos metros.
Después, la misma se convierte en una canal de bloques (III) hasta su final.
En una cómoda repisa y sobre dos clavos montamos el tercer relevo. Estamos montados sobre el ramal izquierdo de la Y”.
Estos tres primeros largos se repiten con frecuencia por ser comunes con la vía “Cepeda” a la cara este. Si bien, no pertenecen a esta última como frecuentemente se dice, sino a la “Schulze”, ya que fue abierta con anterioridad.
Desde la reunión observo a los escaladores que nos preceden, que ya ha superado el ramal derecho de la “Y”. Asegura a su compañero en el quinto largo, el cual les llevará a la gran cornisa.
Abajo, en la cuarta reunión de la Schulze.
Los compañeros llegando a la tercera reunión.
En la cuarta tirada se hace la travesía entre los dos “brazos” de la “Y”. Pasamos del izquierdo al derecho en un vadeo limpio de seguros. Primero bajando por una canaleta cinco metros,
para posteriormente atravesar, ascendiendo ligeramente, hasta el espolón donde fotografié anteriormente a los escaladores que escalan por delante.
Nada más trasponer dicho espolón (IV), se monta reunión con friends. (un clavo).
Quinto largo. Éste nos llevará a la gran cornisa en unos 25 o 30 metros por canalizos de III+. Montamos reunión limpia en la terraza.
Nos desatamos y caminamos con atención hacia la vertiente norte en horizontal (II-, 70 metros). Agotamos la amplia vira hasta dar con la sexta reunión, ya común con la vía “Pidal – Cainejo”. Relevo en una repisa con tres clavos.
En la gran cornisa.
Croquis de la segunda parte de la escalada.
Comenzamos escalando por un pequeño diedro vertical y tras elevarnos por unas fisuras, montamos la “R” en la propia chimenea sobre clavos (IV+).
Unos metros antes de la primera panza.
y saliendo de la misma.
Afrontamos los dos últimos largos de cuerda para superar la gran grieta norte. Primero, por la propia chimenea que en este punto ensancha un poco.
Ganamos metros trepando por una roca que pasa a estar más pulida, hasta llegar a un bloque de quinto grado que cierra el paso. Nada más sobrepasarlo, se monta la R8 en un espacio cómodo con dos clavos a la izquierda (45 m).
Debajo de la segunda panza de burra (V).
Recuperando el largo, con el mar Cantábrico al fondo.
En la última tirada estiramos cuerdas al máximo, trepando primero unos bloques (IV). Posteriormente, la pendiente y dificultad disminuye.
Abajo, en la última reunión, (limpia).
Plegamos cuerdas y seguimos por la canal con cuidado de la piedra suelta, ya que puede haber gente escalando por debajo.
Trepamos algún paso aislado de III grado,
Y ganamos la arista cimera que desemboca en la cumbre.
La cordada en la cima del Picu Urriellu, 2519 m
Foto obligada en la cima del Picu; La Virgen de las Nieves.
Descenso, como casi siempre, por los rápeles de la cara sur.
Longitud de la vía 450 metros con pasos de V grado como máximo. Gran itinerario histórico y largo. Con un juego de fisureros, aliens y algún friend hasta el uno será suficiente. Bastante equipación en la vía al pasar la “Cepeda” por los tres primeros largos de la “Schulze” y de la misma manera ocurre en los largos de la chimenea norte, al ser comunes con la “Pidal – Cainejo”, dos de las vías más repetidas en el Naranjo de Bulnes.
“Si la primera ascensión de 1905 nos llena de admiración, la expedición del doctor Gustavo Schulze es uno de los más bellos capítulos de la historia del alpinismo”.