Pasado el puerto de Piedrasluengas en la vertiente lebaniega, encontramos esta estupenda peña para la práctica de la escalada a largos. Situada sobre la localidad de Caloca, la Peña Cigal es una modesta cumbre de 1532 metros, pero con la peculiaridad de tener un paredón calizo en su vertiente suroeste que supera los 250 metros.

Esta zona presenta más de 17 vías abiertas, de variada dificultad y longitud, pudiendo encontrar vías de hasta ocho largos y unos grados que oscilarán entre el IV y el séptimo grado, artificial incluido. Dentro de estos datos están englobados la mayoría de escaladores, así que todos encontrarán su terreno de juego a medida en esta peña.

Una de las carácterísticas de casi todas las vías de esta pared es su equipamiento con parabolts al igual que las reuniones, lo que hace que escalemos con relativa seguridad en una pared en la que “tirar” largos. Indicar que los seguros que encontraremos tendrán bastante más aleje que en muchas escuelas de deportiva.

Bajando el puerto, nada más pasar el km 13, sale a izquierdas el desvío a Vendejo y Caloca. Entre ambos pueblos dejaremos el coche, en unas casucas llamadas “El Cigal”. Desde aquí, la aproximación no es larga y tenemos la pared totalmente a la vista. Tomamos una pista al final del pueblo y al poco tiempo la abandonamos a la derecha para atravesar un pequeño tramo de incómodo bosque. A continuación se abre en una inclinada panda que te deja en la pared en unos minutos. El arranque de la vía lo tenemos justo a la derecha de los dos grandes diedros que aparecen en la vertical del collado que separa ambas cumbres.

1º Largo, 6a: Entramos en la vía de izquierda a derecha por una fisura con hierba de III, encontrando el primer parabolt muy alto. Lo chapamos y se endereza. Entramos en un tramo de placa con dos pasos de 6a protegidos por sendas chapas para encontrar la reunión unos metros por encima.

2º Largo V+: salimos a la derecha de la reunión directos a por el primer parabolt. Superamos una zona de hierbas y nos movemos con ligera tendencia a la izquierda siguiendo la línea de chapas. Pasos de placa intercalados con algo de canto.

3º Largo V+: La tercera tirada sigue la tónica del anterior. Se sale escalando con tendencia a la derecha de la reu con pasos chulos atléticos con algo más de presa y alguno en placa. La línea nos va moviendo hacia un gran rellano herbáceo, donde encontramos la reunión en su lado izquierdo. En este punto nos cruzamos con la vía Sigicias, que saldría hacia arriba por el espolón que está sobre la reunión (6c).

4º Largo III-: Largo de transición que atraviesa el jardín colgado hacia la derecha. Se eleva unos metros por unos bloques fáciles hasta dar con  otro zona hebosa más pequeña en la que encontramos la reunión provista de un cable a la derecha.

5º Largo, V:  Salimos trepando hacia arriba donde vemos una oquedad. La superamos por la derecha primero y en un paso a la izquierda para situarnos por encima de ella. Es el único paso del largo y tiene un parabolt a la derecha del agujero. Nada más superarlo, arranca una canal de hierba de unos 20 metros que remontamos hasta la reunión que la montamos en el pasamanos que está instalado para facilitar la bajada de las vías.

Los dós úlitmos largos desvirtúan un poco la vía y no van en consonancia con los tres primeros. Aunque hay bastante verde en esta línea del paño, no estorba en exceso.

El descenso lo hacemos siguiendo el pasamanos hacia la izquierda y luego destrepando por largas viras hasta la ladera inclinada que baja al pueblo.

Esta vía fue abierta por Antonio G. Corbalán, José Revuelta, Andrés G. Palomo y Joseba Ruiz.