Aguja de la Palanca, 2435 m. AD+, IV. Vía “Los Canalizos”, 180 m. V.
Puñal calizo que se eleva en la vertiente meridional de la Torre de la Palanca, una de las grandes montañas que encontramos en el entorno de Collado Jermoso al sur de los Urrieles. Esta afilada pica, presenta una atractiva silueta al ser observada desde las Colladinas. Desde aquí, según avanzamos por el camino de Jermoso, su imagen se mimetiza fácilmente con la inmensa muralla meridional de la Palanca, perdiendo con ello el efecto llamada que toda aguja aislada produce en el montañero. Aunque su altura supera ampliamente los dosmil metros, su ascenso podemos catalogarlo como de coleccionismo ya que la cercanía del Llambrión, Peñalba y demás montañas de gran entidad que la rodean, hace de su elección algo inusual.
Como toda aguja, requiere cuerda y algo de material para escalarla. Así que, aprovechando el largo porteo obligado que haremos para atacar su cima, mejor echar algo más en la mochila y combinarlo con una vía de la zona. La más cercana a ella es sin duda la vía de “los Canalizos”, que finaliza a escasos metros de la base de la aguja. Una mezcla de las dos actividades puede ser una buena manera de pasar el día en el incomparable entorno de Collado Jermoso.
En la cima de la Aguja de la Palanca con las Peñas de Cifuentes al fondo de la imagen.
La primera escalada a la vía de Los Canalizos corre a cargo del histórico guarda del refugio de Jermoso Adolfo Cuétara junto con José Manuel Fernández (†) en el año 1999. De la primera ascensión a la Aguja de la Palanca, desconozco dato alguno.
La aproximación que utilizaremos será la misma que para acceder al refugio Diego Mella (Collado Jermoso). Si bien desde el Cabén de Remoña (1780 m), salvaremos menos desnivel que desde la localidad Valdeonesa de Cordiñanes (850 m). Seguiremos el camino de acceso normal a la Torre de la Palanca, abandonadolo de forma evidente con el comienzo de la vía a la vista.
La dificultad de estas actividades son similares y bastante asequibles. Toda la línea ronda el cuarto grado, excepto el comienzo de la vía en el que salvamos un pequeño extraplomo que quizá llege a quinto. Recalcar que la calidad de la roca en esta vía nos va a hacer disfrutar en muchos tramos. Muy buena. Excepto en el zócalo de entrada de la aguja que está algo roto, el resto es franco.
El material que llevaremos si únicamente escalamos la aguja –accediendo a su base por la ruta normal de la Palanca– sólo será una cuerda o un par de cordinos de 30 m, 3 cintas y un juego de friends hasta el número 1. Para escalar la vía de Los Canalizos necesitaremos dos cuerdas de 60, juego de fisureros y friends hasta el número 2 y 8 cintas largas. Tres reuniones de dos clavos y sólo uno más vimos en todo el recorrido. Se asegura bien.
El descenso de la aguja lo hacemos mediante un rapel desde la instalación que existe debajo de la cima. Después, continuamos horizontal hacia el oeste a coger el camino de la ruta normal a la Torre de la Palanca, que a esta altura discurre pegado a las torres Delgado Úbeda y Diego Mella.
En las inmediaciones de Valcabao, vemos la vertiente meridional de las altas cumbres del Cornión asomando sobre el mar de nubes
Desde el Cabén de Remoña (1780 m) ascendemos por el sedo hasta el alto de la canal de Pedabejo (2030 m). Seguimos el camino de Jermoso hasta rebasar la última colladina. Unos metros más abajo, en el cartel indicador, tomamos el sendero que se eleva al norte metiéndonos en el hoyo del Llambrión.
Camino de Jermoso con la arista Peñalba-Diego Mella al fondo. Al pasar las Colladinas, la vía y la aguja estarían a la derecha (norte).
Seguimos el sendero hasta que tenemos de frente la vía. Nos encaminamos directos a ella teniendo que ascender aún unos metros hasta llegar a la base. Suelen aguantar los neveros hasta avanzada la temporada, pudiendo estorbar en el acceso al arranque de la vía. Abajo el croquis de la escalada con nuestras sensaciones. (pincha en la imagen para ampliar).
El inicio de la escalada lo identificamos facilmente a la izquierda del gran fisurón inclinado que surca la pared con una gran oquedad en su mitad. Nos situamos en la vertical del nicho-terraza donde se intuye el fin del primer largo, justo en una zona algo desplomada y montamos reunión con fisureros.
Primer largo. Entramos con un paso más o menos apretón según le cojamos más a derecha o izquierda (V-). A continuación llegamos a una zona placosa (IV+) y después por unos canalizos con una roca excepcional que nos harán disfrutar hasta que la pendiente vence en un nicho. Montamos reunión sobre dos clavos. Largo limpio
Largo 2. Para mi el más bonito (IV). Cortito pero muy chulo. Salimos a la derecha hacia los abismos chapando un clavo oportuno. Nos elevamos unos metros sencillos y hacemos una travesía más impresionante que difícil encontrando a su fin, un par de clavos con un cordino para montar la reunión.
Largo 3. En el tercer largo vamos a estirar las cuerdas hasta una repisa, saltándonos una reunión opcional intermedia. Comenzamos vertical desde la reunión por una zona franca encontrando unos metros más arriba una serie de canalizos (IV+). Entra algún friend y un puente de roca abajo. Llegamos a una vira horizontal donde estaría la reunión intermedia (a montar en un puente de roca). Ahora identificamos encima un diedro marcado que escalamos (IV) hasta llegar a una terraza donde montamos el relevo en otros dos clavos.
La roca es buenísima!
Largo 4. Ultima tirada que nos saca de la vía. Salimos a la izquierda de la reunión y ascendemos directos por una fisura vertical hacia una grieta inclinada muy marcada que tenemos encima. Nos aseguramos con algún friend y la superamos de frente o más fácil por su lado izquierdo (IV), tendiendose la pared poco a poco. La reunión la montamos en algún bloque de los que encontramos aquí.
Saliendo de la vía de los Canalizos, con la norte de la Torre Friero detrás
Finalizada la vía, recogemos y caminamos los escasos metros que nos separan al este de la Aguja de la Palanca. Una vez en el zócalo de entrada, buscamos y montamos reunión lazando un bloque con una cinta larga.
Trepamos unos metros hacia la derecha (II), hasta una profunda brecha que nos separa de la aguja propiamente. Nos montamos en la misma superando un murete corto de roca dudosa (IV), llegando a una repisa inclinada al pie de la cara oeste de la aguja.
Ahora por la repisa inclinada trepamos hasta el úlitmo muro donde mejora la caliza. Está fisurado hacia su mitad y lo utilizamos para protegernos con un friend del uno y llegar a la cumbre.
Bajo la cumbre un tinglado de rapel con clavos y cinta que utilizamos para asegurar a los compañeros y posteriormente para bajarnos. Abajo los úlimos metros.
Nos reunimos los tres en la cumbre con buenas vistas de la Torre de Peñalba y vecinas. Hacemos las pertinentes fotos de cima y preparamos el rapel para bajar.
El rapel, al igual que la vía, es corto y no llega a los 30 metros
Torres de Peñalba y Delgado Úbeda desde la base de la Aguja de la Palanca
Plegamos velas y nos ponemos camino de la Vega de Liordes, hasta el Caben de Remoña donde comenzamos por la mañana.
Los Canalizos es una ruta muy agradecida. La calidad de la roca y la dificultad moderada la hacen muy apetecible para completar una estancia por el entorno de Jermoso. La aguja es posible ascenderla sin escalar la vía. Sólo tenemos que ganar altura por el camino que lleva a la Palanca y desviarnos en horizontal cuando estemos a su altura buscando la traza menos incómoda para ello. Así ganamos su base teniendo que escalar únicamente los últimos metros.
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